jueves, 10 de diciembre de 2009

ATROPELLOS...


ATROPELLOS


//Por ese pan de comer y el suelo para dormir. Registro para nacer, permiso para reír .Por dejarme respirar y por dejarme existir. Dios le pague . Por el placer de llorar y porque estamos ahí ,por los chistes en el bar y el fútbol para aplaudir . Un crimen pa comentar y un samba pa divertir. Dios le pague .Por esa playa , esa falda , El amor hecho de apuro luego afeitarse y partir. por las mujeres de aquí .Por el domingo , qué lindo , televisión y maní . Dios le pague . Por esa grapa de gracia que tenemos que beber . Por ese humo desgracia que tenemos que toser
Por los andamios de gente para subir y caer . Dios le pague . Por otro día agonía para aguantar y vivir . Por el dolor de la gente que en la ciudad se ha de oír . Y por el grito demente que nos ayuda a huir . Dios le pague . Por esa arpía que un día nos va a adular y escupir .Y por las moscas y besos que nos vendrán a cubrir .Y por la calma postrera que al fin nos va a redimir Dios le pague ."//

Chico Buarque.

Este hombre que se llama Pedro se fue antes de anoche a Este recostarse y por unas horas intentar evadirse de la vida infausta.

Y descubre que un organismo llamado Anmistia Internacional dice que en un país de América del Norte llamado México, su ejército se ha dedicado con el propósito de combatir el narcotráfico a cometer una serie de atropellos y violaciones a los derechos que los habitantes tienen. Sus actuaciones han ido desde el robo, homicidios, violaciones y todo tipo de vejaciones y agravios en contra de las personas. Es por lo tanto que esta ONG hace un llamado a la comunidad internacional para que cesen los actos bárbaros de este ejército.

También por la tarde una señora entrevistada en una comunidad de la Baja California dice que los verdes, llegan y sin preguntar se introducen a las casas, se roban todo y después se llevan a los hombres.

El hombre que se llama Pedro intenta en sus ideas componer los pensamientos y dice para sí:

Buenas tardes. ¿Se encontrará el señor traficante ?-

-Una mujer responde.-

- Está dormido. Es que llegó tarde. Las personas a las que les tenía que entregar 5 kilos de cocaína se tardaron en juntar el dinero para pagarle. Está desvelado.

-La misma mujer les dice a los soldados : ¿ Gustan pasar, ahorita les traigo un café mientras lo voy despertando.

En eso sale el traficante y los saluda.

- Buenos días señores militares . Mientras les extiende su mano.
- Venimos por usted.

-ah¡.

- ¿ Cual es la razón’?.
Vera usted:

Tenemos razones de inteligencia que dicen que usted se ha dedicado en los últimos años a transportar drogas desde hace más de diez años a los Estados Unidos.

La mujer les acerca el café e insta a su señor a que se cambie.

-Por nosotros no se preocupe, contamos con tiempo.

- ¿ Gustan desayunar?.

Entonces el traficante le dice a su vieja.

-hazles a los señores uno huevos estrellados y unos frijolitos refritos, su juguito de naranja y pan tostado con mantequilla.

Los soldados se sientan y con suma amabilidad, departen la mañana, comentan anécdotas, y al cabo de las diez se despiden de la mujer y con trato que asombraría a cualquiera, le piden cordialmente al traficante que suba al vehículo militar. Se despiden de la señora con pañuelos y la señora le coloca a cada uno un clavel en el ojal de su uniforme.

Claro que no señores de Anmistia Internacional.

Para detener a estos hombres se tienen que usar métodos rudos que dobleguen a tanto envenenador.

En México ocurre que en muchas de las acciones que emprende el gobierno federal no logran convencer a sus ciudadanos. Sin embargo una de las instituciones que en verdad sirven es precisamente el ejército. Ellos están presentes cuando hay riesgo, acuden a las zonas de desastres y los puedes ver en las sierras arrasando con plantíos de enervantes que de no hacerlo serán introducidos al mercado para envenenar a los muchachos y muchachas.

Luego el hombre que se llama Pedro piensa en las declaraciones de un gordito de apellido Encinas que dice que las designaciones del nuevo gobernador del Banco de México y del Secretario de Hacienda y la Sedesol no son más que actos de cuatitud del presidente para favorecer a sus amiguitos.

El hombre que se llama Pedro se acuerda que cuando el ciudadano gordito fue jefe interino de la ciudad de México, también fue puesto por su casi hermano, su amigo del alma ese amigo que cuando habla no se entiende ni él mismo . Entonces pá que habla señor gordito.

Atornillado a su cama mira la teve y ve a un hombre en calzones que es golpeado en un pueblo cercano a Naucalpan. Recibió una putiza de fuente ovejuna porque intento violar a una joven. Y lo que logró fue darle una cuchillada.

Luego toma Dalai que sirve para puta madre porque cada tres horas despierta…
Pedro tiene ahora un malestar en el estómago. Dice para sí que los pinches camarones a la diabla le ocasionaron tales estragos. Busca dormir a todo tren y cuando lo logra :

Se encuentra en un hospital Vall d Hebron de la ciudad de Barcelona.
Primero se descubrió, antes de su malestar que tenia un letrero en el culo que asi decía : Debido a su incumplimento y a su negativa de pagar los impuestos a los que esta obligado se decidió de acuerdo a las leyes que nos rigen y según el artículo de la Hacienda fracción quinta diagonal dos que se le aplique primero un susto estomacal que le ocasiones fuertes y agudos dolores con pequeñas dosis de chorrillo intermitente que lo obligen en lo posterior a acudir a saldar su adeudo con el estado.

Pedro siempre que le llegan citatorios los hacia rollito y los mandaba a la chingada.

Las autoridades como no veían claro decidieron portarse radicales y después del anuncio que le colocaron en el culo lo pillaron una noche de diciembre y tras una operación quirúrgica le colocaron una aro en el ano que se irá cerrando paulatinamente.
El caso es que si Pedro paga sus impuestos en los tiempos establecidos, pués podrá acudir a cagar limpiamente y hasta con placer. Ahora bien , en el caso de que se haga pendejo y evada sus obligaciones para con el estado el aro se irá cerrando hasta que le impida cagar.

Pedro no hizo caso de las advertencias y tras sufrir fuertes dolores le pidió a su ayudante que por favor lo trasladaran al hospital para que le quitarán el artefacto.
Al verlo los doctores explicaron al paciente que eso no lo podían hacer. De hacerlo ellos mismos se convertirían en cómplices.

Pedro estallo en ira y tomo un bisturí que sus ojos descubrieron. Con todo y su dolor hundió el metal en su estómago y de una tripa brotó la caca de tal manera que los galenos quedaron asombrados. Supusieron que de una peritonitis aguda nadie lo salvaba.

Cuando Pedro se sintió descansado y ya sin dolores, se levantó del sueño en medio de un olor de puta madre. levantó las cobijas para descubrir que había mierda por todas partes. Al hacer un recuento de tales situaciones intentó sentarse en su sofá individual y descubrió con mucho desgrado que alguno por la madrugada o por la noche le colocó el desagradable aro en el interior de su fundillo.

Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
Para elpueblodeletras.
Nec spe, nec metu
Estados Unidos Mexicanos.
10 diciembre de 2009.