sábado, 19 de junio de 2010

SUEÑOS COLOMBIANOS


SUEÑOS COLOMBIANOS.



Como el crimen no espera y la oportunidad se encuentra a ojo de gato, en cualquier esquina. Ahí lo puedes ver. Lleva como siempre las intenciones escondidas, se oculta como los animales depredadores, aguza su ojo y se siente inteligente.


Pero como siempre hay un pero, hay otros que también lo acechan, ahí están, usan la tecnología, deben de ser lobos uniformados que trabajan para que se restablezca el estado de derecho del que todos padecemos.


Por ejemplo, vemos un coyote, de camisa roja. Este comedor de carne , habla por teléfono y decide que los recursos del estado de Veracruz en México sean destinados a favorecer a los otros coyotes candidatos indicados que a su vez le servirán para seguir agrandando su imperio jarocho.


Posteriormente otro grupo de mamíferos del centro, mamíferos de tono azul le descubren por medio del espionaje telefónico como se las gasta el gobernador. Deciden sacarlo al balcón y Fidel se encabrita y lleva sus impulsos a denunciarlos ante la PGR.

Y sigue por otros caminos y veredas, aún no sabes la respuesta pero sí preguntas:

En 1971, En la Casa del Lago en Chapultepec, se presentó un joven muchacho con su guitarrita en mano y entonó una cancioncita. El adolescente tenía por ese entonces el nombre de Figueroa.

Dice que también boleó zapatos y vendió gelatinas. De ahí aprendió los gritos y el colmillo para los negocios.

Ahora al paso de más de treinta años, es un señor que dice se dedica a la canción popular. Dice el, ahora a razón de la muerte de su hijo; es el segundo que le matan en forma violenta que NO ES NARCO TRAFICANTE. Y dice que cuando estaba velando al fruto de su sangre un grupo de hombres del gobierno _ El ejército de México- entró a uno de sus ranchos en Taxco con el motivo de revisarlo haber que se encontraban.


Si hubiera estado ahí les hubiera pedido que me revisaran hasta por debajo de la lengua. ¿Sí, pero también de las narices? . Hasta ahora no sabes de ningún señor traficante que presente una conferencia de prensa para decir que lo es.


El crimen está ahí, criminis scelus scéleris y no es solamente matar. Es una acción de maldad, es asesinar, propio de los hombres malvados, alguna posibilidad de desventura,una pena mayor,hasta un suplicio culpa o delincuente.


Apenas dan las nueve y ya me grita un señor por un megáfono que atraparon a un secuestrador a la vuelta de la calle. Grita que salga uno y le compre el pasquín, pués ahí esta su fotografía. Nadie se salva, el crimen nos lleva en ese mar violento de aguas violentas.


Usted se encuentra en una carretea al borde de un abismo. En un automóvil rojo intenso se dirigen a un lugar que según le dice Gustavo se llama Colombia. El va conduciendo por ese camino. Las ruedas del carro valiant, apenas rozan, cuando tres de ellas entran, la cuarta se mantiene el en aire y vuelve a entrar.

Al término de este, Sólo hay una barrera de piedras, no hay para donde ir. Usted mira al abismo y a lo lejos descubre una geografía parecida a las barrancas del Distrito Federal. Gustavo sale de carro, y le pide que haga lo mismo. Luego con una fuerza descomunal levanta el rodador por la parte de enfrente y lo deja caer de un lado. Luego lo recarga en otro extremo y lo sube por las piedras que deben de pesar como veinte toneladas. Usa sus manos y lo jala hasta que lo pone de nuevo en la siguiente carretera. Se vuelven a subir y avanzan. No llevan ni dos kilómetros cuando llegan a una casa que se encuentra en un pantano. Ahí no llegan nadie, ni los carros repartidores , ni la policía y mucho menos candidatos de puta madre.


Salen a recibirlos una familia que de momento se sienten intimidados , precavidos por su presencia. El más viejo le pregunta como llegaron y a qué.


Les dice que primero se perdieron y fueron a dar a una carretera de polvo y tierra, y no supieron cuando abandonaron territorio mexicano , ni tampoco cuando dejaron Centro América.


Pués estamos en Colombia le dijo el abuelo. Luego empuñando un rifle, les dijo que lo siguieran a la casa.


Una vez ahí , la que debe de ser la esposa, les preparo una comida picante, y algunas hierbas que no conocía. Apareció un señor mas joven , era el hijo de ellos. Los miró con desconfianza y les preguntó si eran de las FARC. Los dos movieron la cabeza negativamente y esto pareció ser suficiente.


El tiempo en ese lugar era de una lentitud que desesperaba, salían y podía ver un río. Luego algunos pajaros. Por la tarde se sentaban a platicar y la mujer anciana le insistía que le platicara anécdotas de Pancho Villa.

En una de las salas de esa casa tenían un mueble. Era un mueble que emitía música. Lo revisó por todos lados y descubrió que en su interior le colocaron un artefacto que se encendía cada vez que una gallina oculta ponía un huevo. Le preguntó al joven que cuántos huevos ponía al día el ave y este sin soltar su rifle le dijo que uno solamente.


Busco de nueva cuenta el sitio donde le colocaron el artefacto. Les explico que haría unos ajustes en el mecanismo con el propósito de que la gallina pusiera más huevos. Todos ellos rieron de buena gana, la pinche gallina está vieja, dijeron en canción. Solo ha puesto uno diario en toda su vida.


Les pidió un desarmador y le llevaron uno gastado de la punta. Le dio unas vueltas chiquitas y les dijo , al momento que la canción se hizo que únicamente le pusieran música de Wolfang Amadeus.

La gallina sacó del culo, uno y otro y otro y otros, hasta completar casi la docena. Todos se pusieron felices de contentos. Ahora se acabaría el hambre.


Se despidieron de la familia colombiana y llegaron a un sitio en donde pastoreaban toros cebús. La mayoría de estos eran de color blanco, y matizaban , metidos entre los pastos verdes…..

Original de Alfredo Arrieta

Para elpueblodetierra.

Nec spe, nec metu

Estados Unidos Mexicanos.

19 de junio de 2010.