sábado, 3 de octubre de 2009

2 DE OCTUBRE


2 DE OCTUBRE



Parece que nada le sucede, que las cosas se encuentran quietas. Incluso aqúel reloj se quedó sin pila. Su gato se encuentra calmado y no emite chillido alguno.

Se encuentra en un día de octubre que le trae recuerdos de cuando los gobiernos de México eran represores. De cómo los soldados entraron a la Plaza de Tlatelolco a matar gente joven. Usted tenía 15 o 16. Su tío entró a la sala de su casa. Se encontraba blanco del susto. Su abuela, la de usted, le pregunto a su hijo que es lo que le había pasado. la respuesta que usted escucho fue: Nos dieron en la madre.

Y así fue los soldados comenzaron a disparar a todo lo que se movia, El saldo no se sabe con certeza, el caso fue que hubo mucha sangre derramada, mezclada entre las piedras del México Tenochtitlán.
Ahora las cosas han cambiado. Hoy por la tarde, por ejemplo, se hacen una marchas monumentales para conmemorar esa matanza y ustedes los mexicanos siempre dicen que el 2 de octubre no se olvida. Es una frase que nutre los corazones y que además guarda un rencor que ahí está latente.

También puede usted ver como aquellos que en esos años se decían luchadores y revolucionarios, ahora son convidados del sistema e incluso cobran su dinero en la nóminas de los gobiernos. Y llegan a la plaza de la muerte y colocan su velitas, cínicos de mierda, colas de paja.

Un grupo importante de muchachos que según la boba de Adela se auto llaman anarquistas, se enfrentaron con los granaderos, es decir el cuerpo que reprime, usted puede ver como en las puertas de Bellas Artes se daban de golpes. Un chaval le decía a boca de jarro al vestido de azul y su garrote que se fuera a chingar a su madre. Otro se daba a la tarea de lanzar patadas a los escudos de plástico.

Ahora las autoridades actúan de otro modo. Ahora te esquilman con elegancia cargándote de impuestos, dejándote sin empleo, y burlándose de la democracia que dicen que ustedes se han ganado. Imponen en los gobiernos a los repugnantes, a gentes que carecen de la elemental educación . Por allá dice un periódico que al pueblo de Iztapalapa lo gobernará un salvaje. O una salvaje. Como es el caso.

Los jóvenes se dan a la tarea de romper los cristales de las tiendas. Esto es porque estos establecimientos representan el poder económico, el poder que le hace trabajar sin chistar para después arrojarlo al bote de los desperdicios.

Usted se encuentra con la noticia de que ahora el gobierno intenta disponer de los ahorros de los trabajadores. Dicen que invertirán el producto de las afores en infraestructura. Después les dirán que ya no hay nada, y los seniles al desconsuelo. Todavía se ven por los pueblos a los viejos que emigraron a los Estados Unidos tratando de que les paguen un dinero que ellos trabajaron, y esto fue por los años 40.

Usted se detiene después de contemplar los golpes entre las personas, civiles y policías y adentrado en la melancolía se acuerda que en los 70, usted se encontró que en su escenario cantaba una magnifica mujer de la Argentina: Mercedes Sosa a la que por allá le dicen la Negra. Mercedes cantaba con tal ánimo que lograba involucrar a quien la escuchaba: Duerme , duerme negrito, que tu mama está en el campo negrito.

Ahora en este tiempo y lugar Doña Mercedes se encuentra con oxígeno y acostada en una cama de hospital, dicen en Buenos Aires que ya le llevaron a un padre para que le brinde la extremaunción , es posible que mercedes se marche, sin embargo su canción le acompañará por siempre.

TITANIC.

Usteded llega a una casa en el campo de México y lo sabe por la forma en que hablan las gentes. Debe de ser por el Estado de Jalisco. Hay lugares verdes, también mucho agua.

Se acerca a la entrada de una hacienda y va acompañado por un grupo de gente. Una de ellas de parece a una actriz que se llama Margarita Sáenz . Es guera de nariz afilada.

Entran a una sala y en el fondo se encuentra sentado un anciano de lentes redondos, es calvo y se presume de él que es una persona con cultura basta. Se llama Germán, pero para usted no es más que un chango marango.

El, los mira y con su mano arugada les indica que se sienten.Después le dice a una senecta con cara de lista o que aparenta ser inteligente que le platique sobre el Titanic.

La mujer aguza sus ojitos y saca un papel que escribió la noche anterior.Ella se llama Helena. Comienza su explicación y cuando va en las primeras palabras Germán la para en seco y le dice : ¡ No mames Helena ¡, te pedí que hables del Titanic pero lo que tú sabes, dimelo con tu boca y tus pensamientos. Helena se queda callada. Es entonces que un niño de trece comienza a decir que a él le gustó la muchacha que se besaba con Leonardo. Y también dice que le dio mucho miedo cuando el barco se fue hundiendo.

German lo miraba como diciendo que muchacho tan guey.
Luego fijó su mirada de gato sabio sobre usted.
Intentó preguntarle. Y al mover sus labios partidos , usted fue más rápido. A mi no me interesa esa clase de cine.
Germán no dijo nada. Al paso del silencio comenzó a tronar el cielo y los rayos se dibujaban a través de una ventana.

La lluvia fue arreciando y un fuerte aguacero se dejó precipitar. De una de las anchas paredes el agua caía a borbotones mojándo las ropas de los visitantes.

Afuera en un techado unos hombres tenía a un caballo entre café y negro. El hombre más fuerte, parecía que intentaba destazar al animal. Pero no era cierto. Sus manos intentaban exprimir la pie del saino y como si de una víbora se tratara le extrajó la totalidad de su uniforme anterior. El caballo con ropajes nuevos salió disparado por los llanos. Se detuvo y lanzó un relincho que le hizo recordar a furia el caballo de las series de televisión.

Original de Alfredo Arrieta
Para elpueblodetierra
Para elpueblodeletras
Nec spe, nec metu
Estados Unidos Mexicanos.