sábado, 29 de agosto de 2009

EL HOMBRE QUE ME MOSTRABA EL MAR O EL LODO



EL HOMBRE QUE ME MOSTRABA EL MAR
O EL LODO.


Dalí

No se bien quién era ese ser , que parecía lodo, de pronto se presentó, se acercó lo más que podía y empecé a eludirlo . Sin embargo el lodo me seguía, me seguía ..

Yo miraba el mar de Veracruz, y si no era en mis pensamientos creía que sí era .

Nos paramos los dos en medio de una fortaleza en la que se podía vislumbrar los barcos quietos las naves cautivas . las barcas de los pescadores, con su redes, sus miradas silenciosas, perdidas .

Al horizonte , miraba el faro que por momento estaba y no estaba, su luz iba y venía mostrando a las barcazas el rumbo perdido de la vida infame , también los cantos y guitarras de Salvador, el negro , que sonaban gastados, rasposos, como sí Salvador hubiera bebido todos los tequilas de los tugurios del puerto.
El lodo, continuaba a mi lado, me abrazaba con sus manotas de agua y tierra y ramas , era como una plastilina aguada y apestosa, su cara mostraba los signos de cortadas de otros tiempos, de cuando era un paisano, casi un perro de puerto, con pulgas y marrano .
Me dijo que de ese mar emergían todos los riesgos a los que yo pudiera someterme, y en verdad que sí era cierto, de ese mar verde, a veces azul de porquería , lo mismo podía vivir el diablo que la ninfa más ilusionada.
Me tomó de la mano y yo presuroso intenté escapar, a quién le puede agradar que un ser sucio y repulsivo , tocara siquiera mi piel . No más cabrón le repetí ; si tu me vuelves a tocar , así lo más mínimo, aunque sea chiquito, te juro que te entierro mi chuchillo que lo traigo bien afilado, y listo para enterrártelo en el pecho , en la cara, en el culo .
Me dijo que se llamaba Pedro y estaba ciego, que su cuerpo se convirtió de lodo, porque Dios así lo quiso, su madre era de barro, y tú también eres de tierra ,¿ no recuerdas lo del polvo al polvo?. Alguna vez te convertirás en lo mismo que yo, de carne pasarás a tierra , después serás hierba , pasará una vaca y te comerá, después serás mierda. Así es todo . Todo cambia, todo cambia .

El lodo se fue arrastrando sus andrajos, en sus manos llevaba un bastón de mando que nadie respetaba . Yo quedé sumido en mis conjeturas mientras miraba el mar de Veracruz ...


Original de Alfredo Arrieta Ortega.
10 de agosto de 2005.
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México.